Metodología

Esta actividad da comienzo a la última fase de la metodología, la Fase 4. Implementación, y tiene como propósito realizar todas las tareas necesarias para la aprobación del plan por parte de las autoridades gubernamentales competentes.

La aprobación del plan supone el arranque de la implementación de todo lo planificado, por ello tiene una alta importancia. Esta actividad será llevada a cabo por el equipo técnico y tendrá que centrar todos los esfuerzos en lograr que la entidad gubernamental competente acepte el plan como válido y este vaya adelante. Esto puede incluir la consulta pública, la aprobación interna y la aprobación por parte del consejo o entidad gubernamental del municipio. A su vez, dadas las numerosas particularidades locales que dependerán del contexto, el tiempo de desarrollo de esta actividad dependerá de los plazos y procedimientos locales.

Para lograr la aprobación el equipo técnico tendrá que revisar cuales son los requisitos normativos y administrativos necesarios exigidos por la autoridad competente. Estos requisitos variarán en función del contexto y país, tal y como se explica en la Revisión del marco legal (Actividad 2). Por ello, es necesario realizar un ejercicio de revisión de los mismos y posteriormente, llevar a cabo todos los ajustes y modificaciones pertinentes para que el plan se adapte a dichos condicionantes. De esta forma, una vez que se hayan realizado todos los ajustes necesarios, el plan estaría listo y no tendría que haber ningún impedimento controlable para su aprobación.

Cabe destacar que dependiendo del contexto este proceso puede tener diferentes etapas y requerimientos. Por ello se propone un ejercicio previo de revisión y comprensión de todos los procedimientos necesarios para la aprobación del plan. Así pues, será importante que el equipo técnico comprenda y tenga presente cuales son los pasos, funciones y entregables en cada momento del proceso de aprobación, ya que los mismos variarán según el contexto.

Una vez revisado todo lo necesario, el plan se presenta a las autoridades competentes según el contexto para su aprobación, aceptación y puesta en marcha; comenzando así la fase de implementación del proceso de planificación urbana.